Edge of Eternity es un videojuego de rol por turnos que busca emular los orígenes del JRPG. Midgar Studio, un estudio de desarrollo francés, anunció este videojuego mediante la plataforma de micromecenazgo KickStarter. Tras un gran éxito, le siguió un largo desarrollo. Ahora llega a consolas cuando el videojuego ha alcanzado el 100% de su desarrollo. Después de una serie de cambios, el videojuego ha pasado a ser una mezcla entre los RPG por turnos y los RPG tácticos.
UN MUNDO CONQUISTADO POR UN EJÉRCITO INVASOR
Hace mucho tiempo, el planeta Heryon fue invadido por una poderosa fuerza extraterrestre. Los habitantes de este planeta se vieron inmersos en una guerra en la que tanto la magia como la tecnología se desataron hasta sus peores y más oscuros extremos.
Ahora ha surgido una amenaza aún mayor: en un despreciable acto de guerra, los invasores liberaron la Corrosión, una enfermedad mortal que convierte a las formas de vida de todo tipo en abominaciones deformes. Debido a ello, los habitantes de Heryon empiezan a despertar.
Es el caso de Daryon, un guerrero que deserta de su unidad tras perder a la mayoría de sus seres queridos y enterarse de que su madre sufre La Corrosión. Por su parte, Selene, sacerdotisa del Sanctorium y su hermana, insta a Daryon a tomar su decisión para partir juntos en busca de una cura de dicha enfermedad. En el camino ambos tendrán que enfrentarse a toda clase de enemigos. Monstruos de diferentes tamaños, soldados, el imperio, gente afectada por la enfermedad y poseídos. A su causa se les unirán nuevos compañeros de forma temporal, con los que aunarán fuerzas para luchar contra el ejército invasor. Una épica aventura les espera.
HISTORIA DILATADA Y CLICHÉS
Sin embargo, no todo es oro lo que reluce. La historia del videojuego tiene una justificación muy simple. Realmente es el tópico que se repite en la mayoría de JRPG existentes. El mundo está en peligro y unas almas caritativas tienen que salvarlo, mientras el resto de la humanidad observa de brazos cruzados. También hay que decir que el videojuego dilata mucho la historia, alejando los puntos de historia unos de otros. Es decir, la distancia entre punto y punto es extensa. No obstante, eso se palia con conversaciones de los personajes en el transcurso del viaje y en las posadas cuando descansan.
En cuanto a los personajes, no buscan descubrir la octava maravilla. Daryon tiene una personalidad similar a la de Noctis de Final Fantasy XV. Daryon es un chico tímido con ambición de salvar el mundo, con las ideas claras. Este actúa en consecuencia cuando es necesario. Respecto a Selene, sí que da un giro más de tuerca. No solo se limita a ser la curandera, sino que es perfectamente capaz de defenderse por sí misma. Es decir, no es un mero reclamo visual ni la sacerdotisa que espera a ser salvada por el príncipe azul. Buen punto en este caso.
UNA MEZCLA ENTRE LOS COMBATES POR TURNOS Y LA ESTRATEGIA
El sistema de combate inicial de Edge of Eternity dista mucho del actual. El original era muy similar al de Final Fantasy VII. Se presentaba como un videojuego por turnos variables, como el ATB (Active Time Battle). En este sistema cada personaje y enemigo tiene una barra de acción (visible o invisible) que cuando se llena permite realizar una acción.
El resultado final en el videojuego sigue ese mismo principio, aunque incorpora un ámbito de estrategia. Se plantea como la jugabilidad de los RPG tácticos, en los que los que los combatientes se mueven por un tablero, potenciando el aspecto estratégico. Aplicando bien el sistema, prima la posición en la que se colocan los personajes, realizando más daño si la acción se propicia por la espalda. Asimismo, los combates tienen una serie de bonificadores que se pueden cumplir en combate. Para incentivar a ello, se ofrecen recompensas como más dinero u objetos.
LA ESTRATEGIA NO SOLO SE DA EN LOS COMBATES
Como buen videojuego de rol que se precie, los combates no lo son todo. Para salir victorioso de ellos, se tiene que hacer una preparación previa. Conseguir equipamiento será algo primordial, para aumentar estadísticas como la fuerza, la defensa y la magia. Asimismo, también existe lo que voy a llamar “materias”, una función evidentemente inspirada en Final Fantasy VII. Se trata de piedras que se engarzan en las armas que portan los personajes. Estas confieren distintas habilidades, como ataques físicos mágicos (en el caso de Daryon) y ataques mágicos o de curación (Selene).
Por otro lado, un punto que suele pasar desapercibido son los objetos. En este caso cobran vital importancia, pues solo valiéndose de la magia, no conseguiremos ganar los combates. Objetos de recuperación de salud y magia, trampas e incluso bombas son algunos de los elementos que podremos usar contra los enemigos. Muchas veces ganaremos combates gracias a estos artilugios que ofrece la tecnología de Heryon.
MUCHO CONTENIDO, QUIZÁS DEMASIADO, AUNQUE NO VARIADO
Además de la historia principal, Edge of Eternity tiene un montón de actividades secundarias. Sin embargo, estas se limitan a ser misiones, misiones y más misiones. Si que es cierto que las hay de todo tipo, a diferencia de otros videojuegos del género. Hay misiones con trasfondo histórico, misiones de cacería, e incluso las que son de recadero. Aparte de eso queda la exploración del mundo y poco más.
LA DIFICULTAD DEL VIDEOJUEGO ES SU PROPIO ENEMIGO
Las dificultades de Edge of Eternity parecen ser su gran punto débil. Más que nada porque hay momentos en los que prima más la aleatoriedad que la habilidad del jugador. Da igual si juegas en fácil o en pesadilla, si tienes mala suerte, vas a perder el combate, con muy poco tiempo de reacción. Si bien es cierto, que cuanta más alta la dificultad, más difícil será salir airoso del combate.
Como ejemplo pongo un punto del videojuego en el que salen espinas del suelo. En ese momento solo dispones de dos combatientes, los protagonistas. Además de los enemigos que aparecen en combate (suelen ser dos o tres) empiezan a salir zarzas del suelo sin parar. Si no cortas el problema de raíz (nunca mejor dicho), la cosa rápidamente se complica. Estas empiezan a atacar una tras otra, reduciendo a cero la barra de acción en cada ocasión. Llega un momento en el que es un monólogo del enemigo, pues acabas no pudiendo hacer nada de nada. Puede que un combate lo ganes fácil y el siguiente se vuelva un infierno.
PERSONAJES Y ESCENARIOS INCREÍBLES, PERO…
Hay que tener en cuenta primero de todo que se trata de un videojuego indie que aspira a ser algo a mitad entre ese término y un Triple A. Pero si se aspira a ello, hay que hacer los deberes. El videojuego en PlayStation 5 tiene dos modos gráficos. Modo Rendimiento y Modo Gráficos. No penséis en el Modo Gráfico, porque se nota que el rendimiento no es adecuado. Centrándonos en el Modo Rendimiento, el videojuego funciona bastante bien, pero falla en el apartado gráfico. Continuamente se puede apreciar popping. Es decir, aparecen y desaparecen objetos en cada movimiento que hace el jugador. Quedando en un aspecto agridulce. De tofas formas, esto es algo habitual en los videojuegos con mapeado abierto, aunque no a tan gran escala.
Por contra, y si que es de aplaudir, los escenarios están repletos de contenido. Personajes, enemigos, árboles, arbustos, objetos, cofres del tesoro y misiones pueblan el mapeado, entre otros elementos. El resultado es la sensación de que el mundo está vivo, con su fauna, su flora y la gente que lo habita. Además, el diseño de personajes es bueno (aunque algo cliché y los escenarios muchas veces se ven espectaculares.
BANDA SONORA APABULLANTE PERO TAMBIÉN DISCRETA
Edge of Eternity cuenta en su equipo con dos brillantes compositores. Uno de ellos es Cedric Menendez, compositor original del videojuego. Además, le acompaña el célebre compositor Yasunori Mitsuda (Chrono Trigger).
Debido a este gran dúo, el videojuego contiene grandes composiciones. Temas épicos y muy buenas canciones en general. Alguno que otro tema podría tildarse de memorable. Asimismo, también abundan temas más discretos, pero que siguen teniendo un buen nivel musical. A destacar los temas de combate, sobre todo el perteneciente a los jefes.
EDICIÓN ESPAÑOLA
Edge of Eternity llega a España mediante la distribución digital y física. El videojuego se encuentra en digital en PlayStation 4, PlayStation 5, PC, Xbox One, Xbox Series y Nintendo Switch (mediante la nube). Por su parte, Meridiem Games se encarga del formato físico, estando disponible en una edición sencilla para las consolas de Sony.
OPINIÓN PERSONAL
Edge of Eternity es un videojuego que llevo esperando desde aquel ya lejano 2015. Aunque el videojuego me ha gustado, sí que me ha decepcionado en algunos de los puntos comentados. Los que más me duelen son la poca ambición de la historia y la poca seriedad de la dificultad respecto a los combates. No obstante, el videojuego presenta una gran banda sonora, personajes carismáticos y un mundo bien construido con escenarios espectaculares. Se puede apreciar que el título quiere abordar mucho, pero no le da para ser excelente en todos los aspectos. Aún así, lo recomiendo a todo fan del JRPG que busque una experiencia clásica con toques novedosos.
Lo mejor:
- Buena banda sonora con temas épicos
- Mundo bien construido
- Personajes carismáticos
Lo peor:
- Fallos gráficos por doquier
- Historia poco ambiciosa y dispersa
- Dificultades muy aleatorias
Fuente: KENTARO GUJ (INFOJAPOJUEGOS)